cómo le explico al corazón que está equivocado
que no nos quiere quien quiere
la sinrazón de andar atado a un yunque que lo hunde
sin siquiera detenerse me dio la espalda mil años
embrutecida por horrendas moralidades en las que me ha colocado el dolor
y a pesar del tiempo me sigue temblando la mano cuando la pienso
como puede ser que no me crea que no me quiera si fui entero y me deshice en su lengua
que extrangulé vocales y verbos para no sentir que me muero
pero que en ella la codicia de mi deseo sufrió de excesos que no controlé
ahora qué mares puedo ver si no hay sirena que despierte mi placer
cuántos nombres diré para nombrar solo una mujer
cuantas faunas silvestres dejaré pasar para decir que soy mío y de nadie más
si me embarga la garganta de su paladar con los labios susurrando desde lejos para no usar
de repente todo el caudal de mi destiempo que se erige en la sal de mis lágrimas
y me somete a vivir pacientemente mientras mi corazón se desangra en el duelo
cómo le explico al corazón que tiene que gobernar el cerebro
que tiene de todo para andar ligero pero que esa nube de smog que fue vapor de barco
ahora no tienta su corazón helado de arroyo seco
y sigo remando en la arena
ridículo
las maromas torpes de quien se ahoga
quien ha querido demostrar que nadaba
y de nadar nada
sin ese destello un día ignoto
y al otro necesario
cómo se ríe de nuevo?
sin ser solo un andrajo
que no mira nada
aunque busque todo elemento
que me acerque
un cacho
un poco
algo