El análisis grafológico del gran Vincent Van Gogh ofrece algunas claves sobre sucompleja personalidad y su estado emocional. Nos basamos, pues, en las numerosas cartas dirigidas a su hermano Theo, en las que se observa rasgos relevantes:
1. Trazos irregulares y agitados: Es enérgica y caótica, lo que refleja su estado emocional inestable. Los trazos fluyen con gran intensidad, lo que es consistente con una personalidad apasionada, pero turbulenta. Esto nos indica que vivía con esas tensiones internas fuertes, propias de alguien que experimentaba altos niveles de ansiedad o estrés.
2. Presión y fuerza en la escritura:
Se muestra una escritura con trazos pesados y presión marcada, lo que se asocia a personas que tienen un carácter intenso, impulsivo, determinado, emocional y sensible. Esta presión se interpreta como esa lucha interna por controlar sus sentimientos. Pero cuando esta se vuelve errática, marcando pastes del texto más fuertes que otras, denota tensión interna. Esa presión cambiante refleja picos de tensión mental que podrían estar relacionados con sus crisis emocionales, reflejado directamente en el papel.
3. Falta de cohesión en las líneas y palabras: El espaciado inconsistente entre palabras y líneas, la necesidad de rellenar huecos sin patrón, decir mucho con poco espacio muestra un pensamiento disperso, donde no hay una estructura mental coherente. Esto se asocia con una mente que lucha por encontrar orden en medio del caos.
4. Tamaño de la letra variable: Se refleja una clara variación en el tamaño de las letras, lo que refleja esa fluctuación en su estado de ánimo. Esto es común en personas que pasan de estados de gran entusiasmo o energía a momentos de decaimiento, quién sufría episodios de depresión y euforia. Bipolaridad.
5. Letras poco definidas: Sus letras se presentan desorganizadas, casi apretadas, lo que puede simbolizar una mente congestionada, posiblemente debido a esa lucha mental. Esto refleja su dificultad para organizar sus pensamientos, algo común en quienes padecen trastornos emocionales.
6. Desorganización en los trazos: Existe una falta de uniformidad, con letras desiguales y desordenadas. Esto sugiere una mente que trabaja de manera caótica, en la que los pensamientos surgen rápidamente y de forma desordenada. Esto refleja una mente agitada y sobrecargada que no puede detenerse.
7. Cambios bruscos en el ritmo de la escritura: Se perciben cambios bruscos en la fluidez de la escritura. En algunas partes, su caligrafía puede ser más rápida, apretada e irregular, mientras que en otras puede desacelerarse y volverse más legible. Rasgo común en personas que experimentan fluctuaciones emocionales.
Como observa el lector, la escritura de Van Gogh muestra una fuerte intensidad emocional, inestabilidad y pasión. Su trazo enérgico y variable coincide con su personalidad atormentada, pero creativa. Queda demostrada, pues, la idea de la bipolaridad del pintor.
PD: esto sólo son “pistas”. El análisis grafológico va más allá y, para nada, condicionar a las personas que lean este artículo.