Conocerte es un privilegio que jamás tendré, pero si me lo permites, me volvería neófito de tu ser.

Mientras tomas una cerveza, observo tus pequeñas expresiones de placer.

Me reconforta verte bien, es un calor que me recorre el cuerpo, y sacia el vacío que tengo dentro.

Con vos encontré un resultado ilógico e incapaz de creer, que me hizo replantear mi forma de ser.

Llegaste para poner en jaque todos y cada uno de mis pensamientos.

Mi mente es un combo de caos y amor cuando estoy con vos.

Quiero recorrer tu cuerpo, saborear tus labios, verte sonrojar y dejarme llevar.

Una historia de amor que nunca existió, que nunca escribí, que mí cabeza creó cuando te idealizo.

Los nervios me bloquean, y los sentimientos no se pueden domar con correas.

Mi sentir no tiene justificación, y como yo, carece de lugar en tu mundo.

Renunció a la Luz que emana tu sonrisa, esperando por la mañana poder olvidar, y solo desear tu felicidad.