Dos que se buscan

Existen tantos otros alrededor que todos parecemos simples gotas en el mar

Pero nunca pasan desapercibidas dos miradas que se hacen una con el instante

Hay uno de esos dos otros que no existe, o nunca parecio existir

mi mirada es la unica que se incendia de realidad

del otro lado del mar nunca hubo nadie

o quizas, no lo percibi en el horizonte

y eso que me he sentado muchas horas frente al mar

ese mar que me ha calmado por su inmensidad

esa mirada otra le inventé, me seduje con la idea de su piel

El vacío de mis días se ha convertido en una fatiga insomne.

Vacío, ensimismamiento.

El pensamiento lo colma todo, no puedo ya realizar ningún movimiento.

Fantasias, charlas pendientes, ira

Quisiera poder volver a leer, tocar la guitarra, disfrutar algo del día.

Soy yo y el vacío reflejándose hacia fuera

¿Seré yo, aburrida?

¿Soy yo, insípida, ininterrumpidamente la misma de ayer?

Una vez más, así como quien está encerrado en un círculo, la incapacidad de ser elegida me toca la puerta.

Me esforcé por volver a leer, me prestaron un libro.

Todo empieza describiendo a una mujer, a un anhelo por verla de nuevo. «Me gusta como describe a la mujer, su deseo irreflenable por recordarla me hizo llorar»

me entristeci

ya no preguntare mas, solo me quedare con la incertidumbre

¿Hay alguien ahi?

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