Temporada de Cáncer
Comenzó la temporada de Cáncer y eso significa que el sol en su recorrido aparente alumbra esa energía, la hace visible y la vuelve más palpable.
El sol es como un reflector galáctico que mes a mes le va dando protagonismo con su luz a cada uno de los signos del zodíaco.
Por eso podemos percibir que este mes la energía de Cáncer se va a hacer notar.
Particularmente el comienzo de esta nueva temporada es muy especial.
Cada vez que comienza una nueva estación o astrológicamente cuando inicia un signo cardinal (Aries, Cáncer, Libra, Capricornio) se marca lo que se denominan: Las puertas del año.
Con cada uno de estos inicios se renueva la energía y esta avanza con una nueva dirección.
Con este inicio tenemos el Solsticio de invierno. Transitamos el día más corto y la noche más larga… ya llegamos a lo profundo. Es la Navidad que el hemisferio Sur se olvidó de celebrar. A partir de ahora irá creciendo la luz
Cáncer nos invita a movernos desde los sentimientos, nos lleva hacia adentro y hacia atrás, para que revisemos nuestras raíces y nos fortalezcamos porque el tamaño de nuestro crecimiento interno será proporcional al que podremos desarrollar por fuera.
Particularmente, este nuevo trimestre, además, nos invita a hacer este recorrido desde la confianza y la fe en nosotras mismas pero haciéndonos responsables de ese camino que elegimos y desde el lugar dónde partimos.
¿Qué representa la energía de Cáncer?
Cáncer es el cuarto signo del zodiaco y como tal debe continuar el camino que inició Aries, sostuvo Tauro y diversificó Géminis.
Pero dará un nuevo paso.
Cáncer es un signo de agua y cardinal, por eso nos invita a movernos por nuestras emociones, nos lleva hacia dentro para que estemos en contacto con ellas. Nos mueve a buscar ambientes donde nos sintamos seguras, confiadas y a salvo, pero hacia abajo y hacia adentro. Por eso se relaciona con la raíz; con el crecimiento y la nutrición.
Esta temporada es la de las raíces, es el momento de volver al interior para profundizar en nuestros vínculos más cercanos: la familia, el hogar, aquellos lugares y relaciones donde nos sentimos como en casa.
Cáncer debe decidir a qué grupo pertenecer y con quien hacer familia. Y para eso habrá que discriminar y dejar afuera opciones. A partir de ahora reconoce un adentro y un afuera.
Adentro: lo similar, lo seguro, lo conocido.
Afuera: lo otro, lo distinto, lo ajeno.
Por eso la temporada de cáncer nos trae:
susceptibilidad, memoria, selectividad, nostalgia, nutrición, protección, temores, sueños, perceptividad, calidez, timidez, reserva, discriminación, imaginación, apego, desconfianza, cuidado, familiaridad, pasado, cariño y mucho más.
Es un buen tiempo para…
nutrir(nos), cuidar(nos) y mimar(nos).
Pero si notamos que estamos viviendo el costado más huraño, intolerante, o castrante de esta energía tenemos la responsabilidad de controlarlo y darle un cauce más productivo.
¿Cómo podemos aprovechar mejor la temporada de Cáncer?
La temporada de Cáncer es un buen periodo para…
Estar más introspectivas, conectar con nuestras emociones y ser más receptiva a las de los demás.
Estar más en casa y en familia, de disfrutar las tradiciones, por qué no compartir una receta familiar, cocinarnos rico y compartirlo.
Demostrar nuestros sentimientos: decirle a los que amás cuanto los amás.
Preguntarnos por nuestras necesidades emocionales, por nuestras carencias.
Dedicar la energía a cuidar a otras personas y dejarnos cuidar.
Habitar nuestro mundo interno.
Cuestionar nuestro pasado, los vínculos y tradiciones familiares, ser consciente de lo que repetimos y analizar cuánto de eso nos ayuda a avanzar y que nos está deteniendo
Establecer raíces y pertenencia, reconocer en qué lugar o con qué compañía me siento en confianza, segura y con ganas de permanecer.
¿Con qué debemos tener cuidado durante la temporada de Cáncer?
La hipersensibilidad puede pasarnos por encima, los sentimientos pueden estar muy a flor de piel
La susceptibilidad o exageración y los cambios de humor.
Actitudes infantiles que pretendan y demanden cuidado y atención externa por demás o que me impidan hacerme cargo de mis responsabilidades.
Presencia de temas del pasado que pensábamos haber superado y que se sientan con la intensidad de la primera vez
El querer encerrarnos y permanecer en nuestro lugar seguro y no darle espacio a aquello que se nos presenta diferente por comodidad o miedo (sean espacios, personas o ideas).
El sobreproteger a todos cuanto tenga cerca, y querer hacerme cargo de sus necesidades y vivencias
¿Cuál es la función de Cáncer en el zodiaco?
Recordemos que Aries había iniciado su camino de manera explosiva, era ese explorador que debía atravesar la selva cueste lo que cueste.
Luego Tauro llegaba a un lugar seguro donde detuvo su marcha para contemplar aquello conseguido, reponer energías y disfrutar de lo que tenía.
Y finalmente Géminis volvió a ponerse en movimiento y quiso explorar y conocer todas las opciones que había a su alcance y descubrir otres exploradores semejantes con quien intercambiar experiencias.
Pero no se puede abarcar todas las posibilidades y entonces llega el momento de elegir, seleccionar e identificarse, de encontrar aquellas opciones con las cuales identificarnos, esas otras personas con quien compartir un pasado, costumbres y ser familia. Es necesario pertenecer a un lugar en donde sentirnos seguras, nutrirnos y poder crecer. Eso hace Cáncer.
Es quien protege, cuida, nutre y da forma a aquello que se seleccionó como propio dentro de todas las opciones que nos presentaba el estado anterior, para asegurar su crecimiento, fortalecimiento y desarrollo.
No hay buenos y malos en la energía, hay etapas necesarias en el proceso de evolución. En el comienzo de la civilización, el clan y la identificación con un grupo nos permitieron generar identidad y reconocernos, pero esa misma pertenecia encontró une otre distinto, y esa diferencia dio lugar a las guerras, la xenofobia y la discriminación en todas sus formas. De igual manera nos puede pasar con la energía de Cáncer.
Si tenés mucho Cáncer en tu carta o un Luna muy cargada, esas características pueden ser muy cercanas a tu vivencia, pero si no es así es un buen momento para conectar con ella e incorporarla conscientemente. Todes tenemos todas las energías en nuestra carta natal y es nuestro trabajo evolutivo sacar de ellas el mejor provecho posible.
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Cuando termine la temporada recordá preguntarte…
¿Me permito dejarme cuidar?
¿Dónde o con quiénes me sentí en casa?
¿Pude vincularme más profundamente con mi familia? ¿Qué me une a elles?
¿Pude demostrarle cariño a quienes me contienen y me sostienen?
Otra información que resulta muy útil es saber en qué sector de la carta tenés esa energía, porque esa será el área de tu vida que se ilumina en esta temporada.
Ese dato puede ayudarte a conocer qué cosas te dan seguridad y protección, desde dónde nutrís tus ciclos personales y con qué te identificás.
Si no sabes dónde está la energía de Cáncer en tu vida escribime y lo descubrimos juntas.
