Dos poemas traducidos de Tapestry and the web.
Joanne Kyger (1934-2017) nació en California, Estados Unidos y fue una poetisa perteneciente a la generación Beat. Como muchas de las mujeres de este grupo se asoció a los Beats al casarse con uno de ellos y no porque reconocieran su labor como poeta. La poesía de Kyger denuncia fuertemente la discriminación que las mujeres de este grupo sufrieron: fueron dejadas en el olvido u opacadas por las figuras de Ginsberg, Burroghs y Kerouac por ser justamente mujeres. Por eso, en Tapestry and the Web (1965), su primer poemario, se propone repensar la Odisea, así como algunos mitos griegos, desde la figura de mujeres excluidas de la narrativa o reducidas a simples esposas pacientes y sumisas como es el caso de Penélope.
En Kyger, el telar, la mujer y la poesía se conjugan creando poemas no solo hermosos sino también fuertemente angustiantes. Poemas que comienzan a cuestionar el rol de esposa y su obligación de atender la casa, el marido y los hijos.
Esperando de nuevo
Esperando de nuevo
para qué
yo no soy la que toma los tesoros del mar
yo observo el tejido – la mujer sentada frente al telar
¿cuál era su nombre? Me refiero a la diosa-
—no a aquella mortal
punteando los hilos
como si fueran las cuerdas de un arpa.
SPRING, 1960
Kyoto
12.29 & 30 (PAN COMO HIJO DE PENÉLOPE)
Refresquen mis conocimientos de Penélope de nuevo.
¿Qué TAN
solitaria fue su espera?
He notado que Alguien le dió ese
musculoso muchachito que se pavonea
alrededor con su gaita roja
no hay fantasía de una pequeña charla.
Más bien es el resultado de una charla GRANDE
y la ausencia de su marido.
¡Y qué hijo idiota y lujurioso! ¡Qué nacimiento
debió ser! ¿Ella habrá apartado la vista?
Creo que soñó demasiado. Cayendo dentro del telar,
creándose a sí misma como un pliegue en el telar.
un personaje de dimensión plana por su belleza
manteniendo una tarea en mente y no dejando que nada Humano la tocara
─lo que es fingir.
Ella sabía lo que estaba haciendo.
FUERA
de eso la tomó.
Algunas cosas se me siguen escapando. Algo
sobre la llegada del barco de su marido a la orilla.
Ella no corrió a abrazarlo según recuerdo.
Él fue hasta ella y hasta la casa y mató a los pretendientes.
YO elijo pensar que ella lo esperó
Inventando sus aventuras trayendo
las desgracias a él
─ ella debió tener sus manos ocupadas.
¿Y dónde escondería ella a su desvergonzado monstruo?
Supongo que él estaba a kilómetros de distancia para entonces, en la lasciva luz del sol
en el pecho redondo de una niña
oveja.
el gallo cantando al atardecer nunca tuvo grandes pensamientos como [los que él tuvo
acerca de despertar al mundo.
Estos poemas fueron traducidos del libro As Ever: Selected Poems (2002) y publicados originalmente en Tapestry and the web (1965)