Qué haces Ale, vine al toque en cuanto me llamaste, no puedo creer lo que me anticipaste por teléfono.

No sabes cómo te agradezco el aguante.

Ni hablar, para eso están los amigos ¿pero de qué te acusan?

Y resulta que ahora soy un misógino. Para que te quede claro: un tipo que odia a las minas.

Ya sé hermano, no hace falta que me lo traduzcas. Pero no me jodas, esa no es una acusación seria. Justamente vos, que sos un winner que te las ganas a todas con la facha, sin remarla.

Vos viste como me buscan siempre. Pero me tengo que comer este garrón de que me acusen de acosador.

Chacho, el mejor amigo escuchaba con paciencia y con asombro en un café de San Isidro, las confidencias de Alejandro.

Pero Alex ¿consultaste un abogado?

Sí, pero ya sabes cómo funciona. Ahora con el tema del feminismo, una mina dice que la obligaste y la acosaste, abusando de tu posición laboral, de tu autoridad y no necesita nada más para mandarte en cana o sacarte guita.

¡Uh! Hablando de Roma, me llama el boga: Hola Doc. ¿Cómo fue la audiencia? ¡Ah qué bueno! dice que se sintió amenazada y se paralizó y que tuvo pánico, pero no que la forcé, ni que hubo violencia……¡Ah! Tuvo antecedentes de ataques de pánico…..¡qué buen dato¡…..no se acordaba qué era lo que había ido a buscar a mí departamento…..ja ja, mejor no te contesto que es lo que fue a buscar….Tampoco es una carmelita descalza ….También admitió que veníamos teniendo relaciones. Vamos bien, se está desdibujando, es confusa.

Igualmente, por mi experiencia en el fuero en este tipo de casos, mi consejo es que arregles. Te vas a evitar problemas. En la empresa no van a querer ruido en los medios o carteles en la puerta de entrada, nadie quiere encima el colectivo feminista. El abogado de Patricia dice que, si no cerramos el tema en la audiencia y la obligamos a someterse a pruebas y preguntas morbosas sobre un momento tan íntimo, el tema ya no va a tener retorno, porque la chica está muy sacada con vos. Pero no cree que quiera un proceso judicial de diez años, porque necesita mudarse ahora.

Qué hijo de puta, me está corriendo, me está extorsionando. Ok. Doc. Me da en las pelotas, pero fíjate cuanto quiere la Virgen María para bajarse de la demanda. Si no es una locura lo evalúo.

El colega habló de quince mil dólares que necesita la chica para mudarse y alquilar lejos de tu casa.

¿Pero quiere alquilar o comprar? Está loca.

Yo le ofrecería diez y seguramente vamos a terminar partiendo la diferencia, pero vas a tener que hacerte cargo de los honorarios del abogado.

Decile que le pago ya mismo a él, pero si baja el número de ella a diez mil verdes.

Ok. Copiado. Me parece una decisión inteligente. Hay que evitar que el tema escale, porque ellas en este momento tienen los fierros.

Ella miente, pero a estas locas les importa un carajo la verdad, les da lo mismo, ellas odian a los hombres. Yo no la forcé, no se sintió amenazada, es un verso, está haciendo un negocio, nunca tuve una denuncia por ese tipo de cosas, ni por ninguna otra, soy un tipo íntegro, un laburante. Ella quiere hacer un negocio.

Si es así, vos también, porque tampoco te veo mucho entusiasmo por seguir adelante y llegar a la verdad, olvídate y cerremos. Bajamos el número lo más posible y te vas de country manager a Transilvania, sino la Pato te va a sacar de la cancha y vas a terminar manejando un ascensor. Si no la tocaste como decís y la mina se pega un par de golpes ella misma en la carita, mañana apareces en los diarios. No hace falta que seas mediático, porque los medios van a comprar la noticia.

Está bien, no me queda otra.

Bien pensado, entonces empiezo a negociar.

Ok. Adelante con la negociación.

Terminada la comunicación con el abogado, los amigos siguieron con la charla.

¿Quién es tu abogado?

Lerner, está en el club.

Si, lo conozco. Mira que el rusito es zurdo .…..

Judío y zurdo, por eso lo elegí. Eso me da un plus, no me van a poder tildar de facho, ni de racista. Me costó un huevo convencerlo de que no la obligué. Me insistió un millón de veces en que solamente tomaba mi caso si le decía la verdad, es un poco desconfiado. Tampoco a veces podes decir toda la verdad, algún detalle me reservé, porque esto fue una cama, una emboscada. Ya me habían anticipado que es buen abogado y muy honesto, porque además es joven y todavía le falta rodaje, de tan honesto ya es ingenuo, lo puedo manejar.

Un abogado honesto y capaz, es una especie en extinción. Ahora Ale, la verdad, a mí no me podes mentir: ¿vos la obligaste?

Pero claro que no boludo, nada que ver, vos la conoces, es Patricia la del gimnasio.

Pará, pará, pará, la Pato tiene un lomazo, todos andamos atrás de ella ¿te la volteaste hijo de puta? Te llevaste el trofeo como siempre, no se te escapa una.

No fue la primera vez, hace rato que nos encamamos.

Y si Ale, vos siempre comiste bien.

Siempre me toqueteaba los músculos y me provocaba, hasta que pasó lo que tenía que pasar.

Pero entonces ¿de qué violación habla?

Es lo que yo digo. Lo que pasa es que se agarra de que soy su jefe porque trabaja en mi división. Habíamos cortado porque yo ya no le daba tanta bola, vos sabes que la proximidad banaliza, pero ella dice que fue la que me dejó y que yo le hacía difícil la vida en el laburo. Vino a buscar algunas cosas que se dejó en mí departamento. Pero lo que no cuenta es que me provocó, me calentó, franeleamos y después, cuando ya estaba regalada no quiso.

¿Y vos la forzaste?

Ernesto, vos sabes cómo es el no-no de las minas cuando están entregadas. Es puro histerismo, gataflorismo. Patricia es una calienta braguetas y a mí no me gusta que me tomen de gil.

No le hables así a Lerner porque te va a rechazar por machista.

No, quédate tranquilo, lo tengo calado al pibe, es tiernito, está con todo el discurso progre, parece del centro de estudiantes. El pibe trafica quaker, con él me cuido mucho de esos detalles.

¿Y ahora cómo sigue?

No lo metieron como violación, sino como acoso, porque ella está trabajando en la empresa y es subordinada mía. Ahí hacen jugar todo el verso de la relación de poder y dominación. Ahora la jueza, me manda a una psicóloga, para que me analice. Te imaginas que ya está todo definido. Las dos son minas: estoy al horno. El boga dice que si no hay ningún conflicto de intereses que lo justifique no podemos recusar a la jueza, ni impugnar a la psicóloga por el solo hecho de ser minas, además eso iría contra su ideología.

Alejandro entró al edificio de Juncal y Arenales, con un impecable traje de Armani. Subió al ascensor en silencio mirando hacia la puerta, tratando de pasar inadvertido para otras dos personas, como si estuviera en una misión de incógnito.

 En la recepción había dos sillones Chesterfield, un escritorio de estilo inglés y un fichero. En la pared estaba el diploma enmarcado de la Licenciada y certificados de cursos y congresos en el país y el exterior. La secretaria tenía un tono amable y discreto.

El ambiente respiraba cierta intimidad y serenidad, pero Alejandro no tenía paz, era como un estudiante enfrentando el más temido de los exámenes. Se repetía una y otra vez: soy inocente, no tengo nada que ocultar, tengo que ser yo mismo. De todos modos, estaba convencido de que el dictamen psicológico ya estaba escrito.

El consultorio mantenía el mismo estilo que la antesala, pero con algunos cuadros de reproducciones cubistas y posimpresionistas. Una ventana amplia, daba a un patio interno con plantas.

La Psicóloga era una mujer joven y distante, con una elegancia austera.

Lo saludó, lo invitó a sentarse y confirmó los datos personales que figuraban en el legajo que había recibido del juzgado que le encomendó la pericia. Alejandro, que ya había repetido sus datos en varias ocasiones y quería poner fin a la sesión lo antes posible, convencido de que sólo se trataba de un mero trámite con un final anunciado y no podía controlar su ansiedad. Se propuso la estrategia de escandalizar a la psicóloga para generar un dictamen exageradamente negativo en su contra y cuestionarlo después por parcialidad.

Ya me puedo imaginar cómo va a ser esta sesión. Yo soy Edipo y espero la oportunidad, para matar a mi viejo Layo y pasarla bomba con mi vieja Yocasta, mientras cocina los ravioles del domingo. Padre asesinado y relación incestuosa con la madre: todo resuelto. Con ese perfil ya me puede definir: soy un golpeador y un violador. Ya tenemos el dictamen psicológico. Disculpa la introducción, pero si no lo tomo con humor me vuelvo loco. Pero claro, ahora recuerdo que los psicólogos no se rien.

No siempre.

Para tu tranquilidad, no voy a quitarme los ojos, porque no cometí ningún crimen consciente: no maté a mi viejo todavía. Ahora seguramente vamos a ir de excursión para buscar símbolos en el inconsciente. Vamos a refritar a Freud.

¿Por qué está tan a la defensiva?

Tengo miedo que mis deseos sexuales se disparen a otro objeto, lo que papá Freud llamaba desplazamiento. Por ejemplo, los pechos de la psicóloga.

¿Preferiría que yo fuera un hombre?

Alejandro cambió el tono, visiblemente molesto – Vine a cumplir una formalidad, porque ya sé lo que va a decir tu dictamen sobre mí perfil: machirulo, misógino, golpeador y violador.

¿Aparte del análisis, que otra cosa lo incomoda?

Que no valoren mi tiempo y me obliguen a venir. Tengo excelente concepto en mi trabajo, que es muy exigente y si no estás atento te pasan por arriba porque es muy competitivo. Voy al gimnasio todos los días y hago vida sana. Me estás quitando tiempo para las cosas que me importan, las cosas trascendentes. Soy muy disciplinado y normal, no me cabe ninguna perversión.

¿Cómo cual por ejemplo?

Ninguna. No soy un adolescente en la edad del pavo.

¿En esa etapa, fue creativo en la masturbación?

Esto ya es desagradable ¿o estás tratando de provocarme? ¿te gusta jugar a calentar a los pacientes hablándoles de sexo y perversiones, con esa blusa abierta mostrando los pechos?

¿Le molesta mi escote?

No se me mueve un pelo, lo que me molesta son tus aires de suficiencia.

¿Eso siente?

Es lo que te acabo de decir. Estás jugando al erotismo desde la impunidad.

¿De qué debería sentirme impune?

La psicóloga sos vos y estás tratando de encasillarme para un dictamen que me mande en cana por acosador, violento y violador. Yo nunca busqué a ninguna, siempre me buscan a mí. Pero tienen que armarme una historia para justificar una condena, para no quedar afuera de la corriente feminista. Es fácil, si no entra el sombrero hay que achicar la cabeza. Ahora falta que me preguntes si Patricia se parecía a mi vieja.

¿Se parecía?

En nada. Para ustedes, el hombre satisface un impulso edípico de un modo seguro, casándose con una mujer que se parece a la madre. Eso en el caso de Pato es ridículo. No le llega a la suela de los zapatos a mi vieja.

¿Cree que las mujeres lo buscan? ¿siempre se siente observado?

Sí, me miran y la mayoría en el gimnasio suele concentrarse en el bulto.

¿Eso piensa?

Otra vez, es lo que acabo de decir.

¿También lo miran los hombres?

Tengo bien definido en que equipo juego. Lo que pasa es que cada vez hay más gays. Está naturalizado, en los baños y los vestuarios siempre sentís las miradas.

Su padre también tiene su misma definición sexual.

¿Pero qué clase de pregunta es esa? Claro que sí, mi viejo es bien varonil, un macho alfa, además brillante y exitoso. Te facilito el trabajo, me puso la vara muy alta en mí auto exigencia y eso es sano, no tengo el proyecto de ser un fracasado, un looser. Me doy cuenta de tu juego. Ustedes creen que el hombre es un mono evolucionado como decía Darwin, para mí es una creación de Dios. Estoy plenamente consciente de eso.

Sólo una pequeña parte del contenido mental es consciente y el resto es inconsciente, con ideas inadmisibles, involuntarias que motivan la conducta

Genial. Ya estamos repitiendo a Freud como alumnos de Puan. Mejor trae un par de ejemplares y los leemos directamente.

¿Estudió psicología?

Un año, no era para mí. Pero además como ya debes haber tomado nota, no reúno los requisitos de moda para ser políticamente correcto y no me convence la ambigüedad. Esto es puro teatro, el mismo Freud llamaba escenografía al consultorio ¿Y ahora qué sigue? Como sólo somos libres cuando dormimos ¿tengo que contarte algún sueño revelador?

¿Por qué no?

Según el maestro Sigmund y su biblia sagrada, si soñé con un paragüas, es un pene, si soñé con una cueva, es una vagina, qué fácil es clasificar. Todo es sexual según papá Freud ¡pero por favor! debo tener los sueños censurados. Llego agotado de trabajar todo el día y del gimnasio, no tengo margen para franelear con esas boludeces de mi supuesto inconsciente reprimido, apoyo la cabeza en la almohada y me desmayo. El sexo lo practico, no lo sueño. No tengo conductas desviadas, no soy homosexual, voyeurista, fetichista, ni travestido. Me disculpo por ser normal, sencillamente heterosexual. No soy padre todavía, ya voy a formar una familia, pero primero quiero llegar a gerente para darle bienestar.

¿Cree que el placer y la procreación son equivalentes y que la relación se agota en el coito genital?

¿Qué es esto, un seminario o una sesión? ¿adónde queres llegar? Si sos bisexual o lesbiana es un tema tuyo, pero yo tengo bien definida mí sexualidad. Te pido que respetes la minoría heterosexual.

Ya repitió varias veces cuál es su condición sexual ¿siente que lo estoy poniendo en duda o necesita reafirmarlo? Lo cierto es que, si bien todos nacemos con una pulsión básica o energía instintiva, la libido o si lo prefiere el deseo, ambos sexos presentan una doble faceta, la bisexualidad o rasgos comunes ¿no cree que tiene un cierto nivel de prejuicio al respecto?

 Soy prejuicioso con los prejuicios. Te veo como la jueza del tribunal por el crimen edípico originario, que según Freud es el origen de todo. Sigmund era un enfermo y ustedes sufrieron el contagio. Con esa impostura y con un discurso solemne, convierten los mitos y leyendas de hace mil años en un tratamiento para diagnósticos en este esta época de la inteligencia artificial: es una locura. Ahora que agregaron el colectivo feminista, el combo está completo. Me gustaría invertir los roles y ser yo quien hace las preguntas para que vos las contestes. Estoy seguro de que no te resultaría tan cómodo. ¿Sabés de qué me acuerdo? de Les Luthiers, cuando cantaban: “Decía el oráculo

                                   Edipo tu vida.

                                    se pone movida,

                                    serás parricida”

Eran geniales, ¿no te parece gracioso?

Si eran graciosos. Pero estaba preguntándome si quizás le quedó la carrera inconclusa de Psicología como una asignatura pendiente, como una frustración o un fracaso ¿no será esa una de las causas de su enojo, al menos de sus ataques a esta profesión y su encono con Freud?

       Alejandro quedó por un momento en silencio: – ¿Eso es lo que vos supones?

La psicóloga seguía imperturbable: – Ciertamente, es lo que acabo de decir ¿Cómo lo tomó su padre, con su nivel de exigencia?

Aceptó mi decisión.

¿Cómo conoció a Patricia?

En el gimnasio.

¿Qué lo atrajo de ella?

Fue ella la que se sintió atraída y se me acercó. Después vino a mi departamento y se quedó a dormir.

Tuvieron una buena relación.

Me llamaba y nos acostábamos cuando yo tenía tiempo. Siempre privilegié mi trabajo y el gimnasio, si no estoy al cien por ciento puedo fracasar y no me lo perdonaría, es mi futuro. Tengo todas las posibilidades de ser country manager en Méjico, porque me evaluaron y doy el perfil de disciplina y liderazgo que necesita la Corporación. No tengo espacio para distracciones. Lo que me faltaba es todo este bardo por Pato, que es una mina con kilómetros de calle que actúa como una colegiala para victimizarse, seguramente debe querer guita. Si la que rompió fue ella…

¿Y por qué rompió Patricia?

Dejó de llamarme y yo tampoco la llamo para preguntarle.

¿Fue una frustración el abandono? ¿no tuvo curiosidad por saber por qué lo dejó?

 Nunca me faltan compañías para pasar los pocos ratos libres que dispongo. Este precisamente hubiera sido un momento libre.

Prefiere que suspendamos ¿se siente muy incómodo?

Yo siempre digo lo que pienso, porque yo no careteo. Si eso te molesta no tengo problema en que suspendas.

No, al contrario, me parece un ejercicio interesante. ¿Lo afectó sentirse abandonado por Patricia?

A mí nunca me rechazaron y ella tampoco. Siempre quieren más atención de la que tengo tiempo y ganas. Seguramente se fue por eso. Ahora por eso resulta que a vos te toca demostrar que tengo violencia reprimida y puedo hacer daño con lo que supuestamente tengo en el inconsciente. Resulta que ahora tengo una demanda por daños causados por mi inconsciente y soy una amenaza: es un disparate.

La energía emocional se desplaza a los síntomas. Los deseos inconscientes toman la energía de los instintos o pulsiones básicas primordiales. La persona que se siente rechazada suele asumir actitudes perfeccionistas y busca la validación de los demás, pero cuanto uno más busca la perfección, más percibe las carencias, y siente más sensación de ineficacia y fracaso. Quizás, por eso usted busca tan ansiosamente destacarse en su trabajo y por su apariencia.

Te repito que nunca fui rechazado, pero además no me parece mal buscar logros en mi trabajo.

La búsqueda constante de validación y aprobación de los demás es común, pero en algunos casos, puede llevar a la dependencia emocional, una disforia sensible por una reacción emocional extrema al rechazo, una sensación de vacío, como si rindiera un examen permanente para sentirse valorado.

¿Pero quién te dijo que Patricia es tan importante? Estás juzgándome de mala manera, tengo autoestima y seguridad de sobra. Allá vos con tu librito.

Para su tranquilidad, no lo estoy juzgando. Usted confunde el alcance de mi dictamen. Debería consultar con su abogado. Pero sigamos. Hay temas que desarrolla ampliamente y en otros es muy parco, como respecto de su padre y Patricia. ¿Sabe si ella está con otra pareja?

No me interesa ¿adónde queres llegar?

Es revelador, cómo cambia su locuacidad, su gestualidad y hasta su particular sentido del humor en esos casos. Con su padre parece asociarse el temor al fracaso y con Patricia la no aceptación del rechazo. Se le puede sumar cierta cuota de narcisismo, de sentirse observado.

Me estás condenando porque no quiero ser un looser y lo del narcisismo es una boludez: ¿a quién no le importa la mirada de los demás?

¿Patricia fue subordinada suya en la empresa?

Sí. Ella me explicó que necesitaba trabajo y yo la recomendé. En ese momento no salíamos.

¿Cómo fue la relación laboral?

Sin privilegios. Como jefe, soy muy exigente, incluso conmigo mismo y ella lo sabía.

Usted tiene un cargo intermedio ¿por qué no avanzó más?

Ahora hay una oportunidad en Méjico, antes me ofrecieron ir a Bolivia y obviamente no me interesó. También podes anotarme como xenófobo en tus apuntes. La única diferencia conmigo, es que digo lo que los demás piensan y ocultan.

¿En algún momento llora? ¿tiene alguna sensación de duelo y melancolía?

¿Por qué no damos esto por terminado, si el dictamen ya lo tenes hecho y firmado?

Lamento su incomodidad. Creo que le haría bien una terapia. Dentro de su blindaje hay fisuras y cambia la temperatura emocional según el tema. No es vergonzoso recibir ayuda o una orientación. La pasión muchas veces proviene del dolor o de la conciencia de la soledad. Hay que buscar en la memoria.

No me interesan los recuerdos, no soy nostálgico, no me gusta el tango, ni los excesos de sentimentalismo. Vos crees que te las sabes todas. Me queres poner la etiqueta de neurótico, hacelo nomás, ya fue. Los neuróticos repiten y ustedes repiten a Freud y a Lacan. En cuanto a mi viejo, él entendió que esto no era mi vocación y que voy a ser un ejecutivo exitoso. Patricia se la perdió: game over. El cementerio está lleno de gente imprescindible.

¿Usted la forzó a Patricia?

 Obviamente no. A vos te parece que necesito aprovecharme de mi posición laboral para conservar una mujer. Me sobran oportunidades, no soy un necesitado sexual, ni un demente.

La psicopatía de un violador no es necesariamente locura, precisamente por eso no lo libra de imputabilidad. Generalmente tienen plena conciencia de sus actos y lo que suelen buscar es ejercer una relación de dominación y humillación. Es más, según surge del expediente, no se concretó la violación. ¿Padece o ha padecido alguna disfunción sexual?

¿Qué disfunción, de qué hablas?

Impotencia concretamente.

Sí es así entonces de qué me acusan si no pasó nada.

De abuso, humillación y acoso, amenazando con el despido si no se sometía.

Te aclaro que tengo muy buena erección y tuvimos relaciones consentidas. No tiene sentido hacer una locura como la que me acusan, cuando estoy tan cerca de que me designen como country manager en Méjico. No te parece demasiado casual que esta acusación se presente justamente cuando tengo todo para ganar ¿para qué me voy a pegar un tiro en el pie por semejante estupidez ¡pero por favor, es que nadie razona! Esto es un negocio. ¿Es que a nadie le importa la verdad?

¿Sufrió algún abuso en su infancia o adolescencia?

Jamás.

Es suficiente por ahora, gracias por su tiempo.

Te recomiendo que vos también consultes con un psicólogo porque se te notan los prejuicios.

Gracias, lo hago. Es interesante, me pregunto si durante la sesión, me interpeló o trató de llamar mi atención con un cierto nivel de sobreactuación por alguna razón o estrategia.

 Te aclaro una sola cosa, aunque no coincidimos en nada y no va a servir tampoco para nada: esto es una emboscada, una cama y todos son cómplices por los prejuicios que prefieren. Yo soy la víctima. Chau, saludos al colectivo feminista.

Cuando sale del consultorio recibe noticias del abogado en el celular: – Hola Doc. Recién acabo de salir del consultorio de la psicóloga….Una pérdida de tiempo, como era de esperar……¿Vos tenes noticias?…….

Estamos negociando, no es fácil, porque ella está muy alterada.

Yo tengo experiencia de negociación en la empresa. Ellos están jugando al límite para mejorar mi oferta. Tenemos que mantenernos firmes para que no se abusen.

 Ahora, entre nosotros, porque sabes que tengo el deber profesional de confidencialidad: ¿la forzaste o la amenazaste?

¿Por qué me preguntas eso tantas veces? no sos el juez, ni el fiscal. Seguís con dudas, ¿no te das cuenta que es un negocio?

Lo que pasa es que, si está mintiendo es demasiado convincente y además mostró marcas en los brazos.

Pura sanata, otra mentira más.

El colega me mostró certificados médicos que acreditan que fue atendida en la guardia esa noche.

Bueno, esa noche luchamos en joda por iniciativa de ella. Fue como parte de los juegos sexuales.

Y en ese caso ¿por qué no me lo comentaste antes?

Porque como te dije, eran juegos sexuales. Se ve que venían preparando el caso con tiempo para afanarme. Es una estrategia, una emboscada.

Mira Alejandro, honestamente me cuesta creerte y esa era la condición que te anticipé para tomar el caso. Tengo demasiadas dudas para seguir adelante y voy a renunciar al patrocinio: es definitivo. Te voy a pasar por whatsapp el teléfono del colega para que hables con él.

¡Qué bien! Te estás borrando por que no queres poner la cara y la firma por miedo a estas hijas de puta del colectivo femenino, dentro de poco ser gay va a ser obligatorio por cagones como vos. Ahora seguro que me vas a prender fuego anunciando que dejas el caso para hacerte popular con esas turras. ¡Felicitaciones por tu ética! Cómo quieras, me estás abandonando, pero no te voy a pagar un mango. Para hablar de guita con el otro abogado no te necesito.

Alejandro, te dije de movida que, para tomar el caso, tenía que estar seguro de que no mentís. Todavía hay estereotipos de género que se ocupan de cuestionar la credibilidad de los testimonios de las mujeres que se animan a denunciar. Las exponen a cuestionamientos sobre sus historias de vida, en lugar de investigar. Yo no me voy a prestar a ese juego, porque va contra mis principios.

Hermoso discurso de pendejo de centro de estudiantes ¿o sea que todo este tiempo me estuviste tanteando a ver si me pisaba en algo?

Necesitaba saber la verdad y no tener dudas.

¡Qué bien, ahora soy el anticristo! Déjate de joder, te estás borrando por cagón y te queres lucir mandándome al frente. Sabes que sos: un zurdo reaccionario, ustedes ven la realidad con un solo ojo.

Voy a mantener la confidencialidad, porque es mi deber profesional, pero vos no cumpliste con el tuyo de decirme toda la verdad, lo de las marcas me lo ocultase y no fue un olvido casual, porque ahora contestaste al instante cuando te mencioné el tema. Me subestimaste y ahora me estás insultando. No me vuelvas a llamar.

Después de cortar la comunicación y de recibir el dato del celular del abogado de Patricia, se comunicó con él: – Hola Doc. Habla Alejandro Seven….¡Ah! ya me ubica…. No, el Dr. Lerner no me patrocina más…..Lo llamo para cerrar los números y terminar la negociación.

¿Qué negociación?