Cortando el amanecer
te moves a través de mí como lo hacen
las sombras de los carteles
huyendo de las luces
del colectivo que gira la esquina
en procesiones semi-circulares.
Como la lenta apertura
de la tela porosa
que ronronea y se tensa
en un abanico.
Como el after image de un cigarrillo
fotografiado por ojos desacostumbrados
a la oscuridad.
(Ambos y yo jugando entre tus dedos)
Te moves como
la dislocada imagen de un proyector viejo:
tu cara sobre la mía
con la que, a medida que amanece,
jugamos a ver
quien desaparece primero.