Tengo 5.

Soy inmortal

  

y mí mamá no me cree.

  

Le explico que estoy acá desde antes

que el estuario y los algarrobos.

  

Confundo inmortal con eterno.

   

Ella lo niega con delicadeza, con miedo

a que entienda lo que esconde el prefijo.

   

Lo niega con miedo y entiendo

que ella no lo es.

   

Y algo tibio y salado mancha para siempre 

todas las cosas que amaré.