lo importante es querer: esa es mi misa, mi oración 

te quiero, cielo. te quiero, lluvia. te quiero, mar

quiero la justicia, el pan, la poesía de todos

quiero la belleza de las cosas

quiero delicadamente, muy despacio – como si así todo se pudiera retener –

y cuando me vaya podrán decir que fue en paz

porque el mundo me dejó amar

mamá, papá, Dios: alguien me quiso,

la ternura fue posible, las flores existieron.