Me soñé en tus pasos sobre el pasto
En las tardes bajo las sombras de tus mil árboles
Los reflejos en la noche y las miradas cultivando una ternura apresurada
Soñé con tus ojos en otro ojos miniatura
Apoyado en nuestra vida
Me soñé inmune a los dolores detrás de los libros gigantes
amontonados sobre el sillón,
La gata en la ventana y la fiesta del amor.
Y de tanto soñarte me quedé en las cosas fabulosas, innumerables que parecen moscas.
En principio con amor para besar tus manos y tu corazón cuando los latidos de los míos
Se encuentren sin función.
No me preguntes solo soy una chica melancólica.