La hostilidad de los hombres que elijo 

Son el reflejo de mi desprecio.

Me han golpeado, me han mentido, 

Me han usado, y se han burlado.

La hostilidad de los hombres 

Me hace reflexionar.

Tirada en la cama lucho contra la lágrima que quiere caer.

Por qué los elijo?

O por qué me eligen ellos a mí?

Cómo si fuera yo una presa fácil.

Ahora lucho contra mi propia estructura

Para hacerme respetar. 

Entonces cae la lágrima

Y detrás de ella un caudal de agua salada 

Que lleva consigo el sufrimiento. 

De años de abandono y desamor 

De corazones rotos e ilusiones destruidas.

Concentrate en vos. Me dice mi amigo.

Hoy aplaudo a Emiliano, y a Gonzalo, 

Porque ellos te recuerdan, la hostilidad de los hombres.

Y yo me enojo, el también resulta ser hostil.

Parte 2.

Practicar el desapego.

Idealización/descarte.

Practicó el desapego del que me regaló chocolates y champagne

Que me pintó un paraíso y después se fue.

Practico el desapego de saltar de hombre en hombre.

Para reconciliarme con la soledad.

Idealización/descarte.

Quizás no tengan la culpa de lo que yo imagino.

Pero aportan a mi cuento y me bajan como a un pajarito herido por una honda.

Practico el desapego porque funciono cuando estoy sola.

Me alejo de todo lo que me hace mal. 

Y soy más libre.

Idealización/descarte.