Son cinco minutos los que nos separan

desde tu partida hace cinco minutos

cinco minutos que no respiro

sólo estoy aquí parada

contemplando la posibilidad de buscarte

correr desesperadamente

llorar por fin al encontrarte

y decirte que siempre te he amado

que tomes mi mano

vuelvas a mi pecho

son cinco minutos que llevo

ideando un plan perfecto que jamás pondré en marcha

porque el amor es magia

pero el miedo es humano.