Tu risa, un deseo ínfimo

Un ángel, lleva consigo tu rostro

Y mi alma, embelesada con tus ojos

Dame razones, calma mi enfado

Mi corazón te has llevado, sin ni siquiera preguntármelo

Dejándome sola, un vínculo trágico

Lágrimas de oro, límpialas con tus labios

Mi tierra seca, aún no floreces

Efímero sueño, cómo me dueles.