Buenos para nada 7

Mientras se lima las uñas recuerda las noches de dados. Las nubes se cuelan por la ventana del living. No hay niños jugando en la calle. Las hojas se desprenden erguidas. Recuerda el reloj que está guardado. Una sensación extraña le recorre el cuerpo y se aferra al sillón azul. Lucha durante el día y se calma por las noches. No hay vigilia entre las alegrías del hogar. La lluvia nunca fue una amenaza. Entonces, escucha una canción vieja y se acurruca.

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