El dolor me rompe el pecho 

Y me lo hace cenizas

Como las que tiro en la taza de café que he terminado.

El dolor me abre el abdomen y me destripa desde dentro

Es un dolor horrible el que nunca me han hecho

Nadie podrá hacerlo más que yo

Este dolor es mío, tan mío como mi propio olor

Es mío como mis recuerdos

Son propio dolor interno 

Me encuentro acostado existiendo

Pero no queriendo vivir más en este olvido eterno

Olvido propio donde no encuentro bienestar

Me alegra despertarme llorando porque quiere decir que siento algo

Me alegra soñar con vos y contarte lo que ha pasado

Casi tres años enteros tengo para contarte desde que te fuiste

Pero tu pérdida es sólo una molécula de lo que me hace sentir triste

No porque sea mínima

Sino porque este cansancio mental tiene más tiempo que el que tu presencia se escapó de mis manos.

Justo cuando te necesitaba más que nunca

Tu ser me abandonó y me obligó a quedarme solo

Este sentimiento de soledad lo cargo desde nacimiento 

Pero desde que te dejé de ver…

Desde que te dejé de ver…

Desde que te dejé de ver todo fue más difícil, 

Y cada noche en la que te lloré

Me sentí más solo que en cualquier recuerdo 

Donde sólo tengo mi reflejo en el espejo a un lado.

Qué dolor, qué agonizante

El de perderte teniendo tanto que contarte

No vas a verme crecer

No vas a verme curar

No vas a verme nunca más 

Y eso es agonizante

Qué dolor el de no tenerte

Para tener donde apoyarme

Fuiste mi sostén mucho tiempo 

Como yo el tuyo

Los dos podíamos con todo

O es me hiciste creer.

Ahora solo, debo poder con todo 

Porque me enseñaste a pelear aunque sepa que no pueda ganar

Y eso es lo que hago

Con la cabeza agachada pero con pecho en alto

Orgulloso de cada combate haberlo intentado

Aún aunque mi enemigo me haya desarmado

Lo miro a los ojos y siento que he logrado algo.

Aunque mis dedos estén llenos de derrotas

Mis ojos querrán la gloria

Y mientras ellos tengan el poder de la mirada

Nunca pisaré el agujero absoluto de no ver aprendizaje en lo fallado.