Una capa fina de vidrio
Define mi estabilidad
Una que con un roce suave
Se rompería sin piedad
En piezas que no encajan entre ellas,
Me canso de tratar de juntarlas,
Busco otros vidrios rotos, personas
Algunos son más gruesos,
Otros transparentes,
Incluso hay algunos
Que parecen ventanas
De un monoambiente
Los cuales son tan importantes
Como para no sentirse en una cárcel de verdad,
Hay también pedazos de espejo
Esparcidos en el suelo
Culpa de no saber frenar a otro
Que ahora lleva la superstición
De 7 años de mala suerte.
Yo siempre entrego mis pedazos
Al que necesite mis brazos,
Lastimosamente pocos han valorado
Los que no, poco se han llevado
Porque lleno de esquirlas para entregar
Me he quedado,
Pocos han vuelto
A entregar fragmentos que añoraba de vuelta
Manoseados, así los devuelven
Y a regañadientes,
Yo con pena de quitarlos
Y que me muestren los dientes;
Me usan,
Me rompen,
Me deshacen,
Asqueroso me siento
Pero por alguna razón
De nuevo me presto