Criatura mediocre, sobre vos impartiré 

la justicia de Dios diciendo sus palabras:

En nombre de todo

lo bueno y santo, Yo 

te condeno.

Un torbellino te azotará

contra las piedras filosas,

los demonios te echarán

sobre la arena ardiente 

y tu cara quedará hundida 

por la eternidad en el hielo.

Entonces no serás ya libre 

ni podrás conmigo 

hacer lo que quieras.