Literatura

cinco puntos suspensivos

la vegetación come carne

y estás llorando a carne tendida

Una carne que no hace vida

quiero caminar por el pasto

sentirme hundir los cayos en las piedras

las piedras en los cayos

y doler

doler el paso que pisa duramente en tu carne

alimentarse para no morir hoy

haber muerto y caminar como alimento

ya no pienso en otra cosa que en una revolución

perder la memoria

quedar como un resto

una momia

ya no pienso en otra cosa

me voy a beber la sangre de las manos

tan rotas que ya no tocan notas

te voy a escribir con los codos lo que borro con la cabeza

y sombrear las curvas de lo que un día fue movimiento

voy a dorar las media lunas nunca enteras

y ni se enteran de la entrega de otras lunas a medias

voy a torcer el coche en la esquina de las líneas rectas

y compartir con mi nombre los crímenes de lesa

a ver qué luz nos envenena

para que callemos la calle que dice basta de bastas

y romper con la tierra santa la relación de fuerzas

vamos a cantar con el poco aire que entra

para entonar que la debilidad igual se queja

que seremos el poema de la orilla

que se barre en la marea y se encalla entre sirenas

y tantos nombres tendremos que la lista durará siglos

5 siglos

diciendo

sin que se detenga ni un poco la topadora de sueños

diciendo

que acá hemos visto

como sopla el viento pero el cabello está muerto

fernando ortiz

Creí que era poesía, pero era mi mente desfragmentándose.

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