pongo la etiqueta poesía

porque con eso solo me dejo correr

como sal que se derrama

sembrando una opinión desde un sweter

llega abril y es nefasto

en las casas se siente la voz popular

no alcanza

no hay plata

nunca hay plata

pero juntamos para la birra

esperando en la esquina

algún trencito que nos lleve al corso

pero hay más resignación y yo con eso no puedo

tomo apurado

siento que no nos va a dar el tiempo

que está por suceder

que salgan de las casas

a las plazas

a encontrarse

a darse el pésame por este muerto

y lo veloriamos

en la vigilia la tristeza anecdótica

medio idiotizante por la melancolía exagerada

pero movilizante por la verdad

y es que todo pasa

mientras no pasa nada

nos mentimos con más ganas que es posible

y nos calentamos los ojos en el fuego

nuestra arma es validarnos

el único tesoro que tendremos

son las horas y horas que hemos estado siendo

sin ser nada de eso

buscamos en textos

en variaciones de clave

en los sentimientos

la emoción que nos mantiene despiertos

esperando

pero tocando ese deseo

de estar listos

cuando nos den las armas

con las que amaneceremos