Amargor
I
Tantas noches
me tuvo mucho en vela
cavilando si acaso
merecía la pena tanta espera.
II
Canta mi alma entera
si te veo venir sonriendo;
y sin embargo,
te vuelvo a ver
y me enveneno.
Quererte yo no quiero
y vivir sin vos tampoco puedo.
III
Cuánto dolor, por mí invocado,
a mi alma
he condenado,
en amar a quien
no quiere ser amado.
IV
Amor devenido en tirano,
vino a mí puñal en mano;
a sangre fría
me lo hubo enterrado,
y alejóse de mí dejando
mi corazón entre
los claveles olvidado.
Fui, vi y no vencí
