Lectores 17
Pediría perdón
por todos los pecados
que en el corazón albergo
mas bien sé yo que no
siempre uno se quema
cuando con fuego juega,
y tanto más disfruto
en ver a quien puedo hacer arder.
Del alma herida
en este incendio,
no querré saber más nada
una vez entre cenizas
yazca consumada.