Escribe poemas en tickets
y los guarda en zócalos falseados
-Bolsillos que le regala el desgaste,
para ordenar lo poco que aún vive-
Natural, parece.
La casa la reserva en rincones llenos
de secretos deliciosos,
de exhibicionismo tímido, culpable, pudoroso
y, a veces, de palabras banales que quieren sonar lindo.
Un día no va alcanzarle
el espacio tras las cerámicas.
Va a tener que buscar
los agujeros de humedad en el techo,
la pintura despegada de los muros,
las baldosas flojas (y secarlas).
(Deseá ser o conocer
unx extrañx que lo halle:
seamos dos)
No soy una Lasagna