Espero tu pelo brillante entre la bruma.
Tu cara borrosa se asoma cantando una nota que vibra en mi pecho,
ninfa atrapada en un naufragio,
fábula nunca leída,
duende de pies redondos y sombrero rizado,
brujo que rompe hechizos en pedazos,
tejido de ensoñaciones e ilusiones,
dulce melodía confusa.
Creo tenerte en mis manos, pero te esfumas en tu vapor,
Y no sos más que una canción que escuche alguna vez
en el camino a casa.