Brilló
en la tarde
un cuchillo
de fina plata
afilado.
Quebró las sombras sutiles.
Dejó mudas las palabras.
Abrió una herida sangrante
en cada rincón del alma
y un nidal de suspiros
se acumuló en la garganta.
Brilló
en la tarde
un cuchillo
dejándome penas blancas.
De fina plata
afilado
cayó vertical
y tenso.
Vibró
lastimando el aire.
Hirió su filo
el silencio.
Y un temblor de agonías
sacudió las sombras largas.
Brilló
en la tarde
un cuchillo
dejándome
el alma
helada.
Me jubilé como docente en el área de Letras.Trabajo en corrección de textos literarios y académicos.