te quiero.
y quiero que sepas que el tocarte no es nada mundano; en cada roce, en cada recorrido de las yemas de mis dedos, en las lineas de tus manos suaves y embelesantes, se escriben todos los deseos que tengo para vos
y es que no puedo dibujarlos, sabés que apenas puedo hacer garabatos
así que espero que te alcance que te los exprese así, a lo gaucho, por escritos en mis arrebatos
arrebatos de locura, arrebatos en los que quizás se me quita (un poco) lo sensato y de los cuales, a veces, ni siquiera me percato.
deseo que sepas todo lo hermoso que te deseo
deseo que tengas un color a tu alcance en todo momento
deseo que puedas entrar en los cuadros cuando la vida pesa, que puedas bailar cuando así lo quieras
y que nuestras canciones te acaricien durante lo que parece el apocalipsis en tan solo una pieza
deseo que me sigas abrazando con todo tu cuerpo creando un campo de fuerza alrededor nuestro
inamovible; resistente y a la vez irresistible.
pero más que nada
deseo que los pliegues de tus ojos sigan dandose a conocer cada vez que te veo y sé, yo sé, que se dan por tu sonrisa que tanto deseo