me encuentro un poco presa en esta ciudad

en los ruidos, en la gente

y en la belleza que hay en todos lados.

amo este lugar

y lo odio porque no es mi casa.

acá no hay amplios atardeceres ni silencios infernales.

lo grises son más densos, los azules más crueles y los gansos son patos

encerrados en una pequeña gota, casi charco.

me visto diferente

hablo diferente

y soy una versión mía aún más amorfa 

y aún más grande que antes.

siento dolores, amores y risas grandes.

todo es grande, es chico y a la vez es muy simple.

está ciudad ha generado una coraza infernal

y me retraigo en el humo frío

por las noches

para no sentirme tan sola.

me encierro en la música que solo puede sonar en mis oídos

en las palabras que solo en mi cabeza

pueden ser recitadas.

balbuceo viejos poemas

y vuelvo al pasado y me enredo 

en oraciones gastadas y aburridas

para entrar en sintonía con tanta monotonía.

no sé cómo explicarte estás grandes y amorfas emociones, que ocupan grandes espacios por las noches.

no sé como explicarte 

cuánto ha pesado 

el pensar.

no sé como explicarte

cuanto ha pesado

el ahora

y el ahora vivir

acá