CARLOS DE PORTO ALEGRE (ESCENAS 13, 14 Y 15 DE 26)

Versión de “Edipo de Tebas” de Sófocles

Por Elizabeth Schaub Farrell

Personajes

Carlos Ramirez: Hijo de Renata e Ignacio/ Psicólogo

Renata Gloriet: Esposa de Ignacio

Ignacio Farrell: Soldado

Fiorella Ramirez: Amiga de Renata

Hijos de Carlitos y Renata: dos niños varones y dos niñas mujeres, de entre 5 y 8 años

Policía 1

Cartero

Mozo

Coro: Tres mujeres

Pareja que desayuna en el lobby

Señor que ojea el diario en el lobby

Escena 13

El Coro anuncia que pasaron seis meses. Carlitos (Psicólogo) sigue consolando y engañando a Renata

El relój no tiene agujas. Un reflector puntual ubicado detrás del público lo ilumina.

Las luces del escenario están apagadas y un reflector enfoca al Coro. Las tres mujeres del Coro se levantan de golpe, se dan vuelta y miran al público.

Coro (las tres al mismo tiempo).-Pasaron seis meses.

Las tres mujeres del Coro se sientan. Se apaga el reflector.

Se encienden las luces del escenario.

El mismo escenario que el de la escena 12, en lugar del escudo de policía hay un diploma de licenciado en psicología. El escritorio está cubierto por una tela negra.

Carlitos (psicólogo) y Renata están agarrados de la mano.

Carlitos.- Yo te voy a acompañar, voy a hacer todo lo que pueda hacer por vos.

Renata.- (Angustiada) Ya pasaron seis meses y todavía la policía no me dice nada. No se sabe quién lo mató, por qué… Nada…

Carlitos.- ¿Hablaste con un abogado? Ya es hora de que hagamos eso.

Renata.- Si. Lo pensé, pero no sé… ¿La policía no se pondrá a la defensiva?

Carlitos.- Veremos qué hacer. Si no, yo te acompaño…

Carlitos se levanta y acaricia el pelo de Renata, Renata se deja acariciar.

Se apagan las luces.

Escena 14

El Coro le dice a Carlitos que le van a pasar cosas malas, porque todavía no les dijo cuál es el acertijo

El relój no tiene agujas. Un reflector puntual ubicado detrás del público lo ilumina.

Se prende un reflector que ilumina solo a Carlitos. El resto del escenario está en penumbras.

Las tres mujeres del coro se levantan y hablan al mismo tiempo. Se dirigen a Carlitos.

Coro.- Todavía no nos diste la respuesta a la adivinanza… Vas a empezar a recibir un castigo… Vas a conocer cosas de tu vida que no te imaginabas conocer y que van a darte un enorme dolor… Y no habrá más que gemidos, maldiciones, muerte e ignominia.

Carlitos.- Ustedes no existen, son mi imaginación.

Las mujeres del coro se sientan, Carlitos se queda parado en el mismo lugar, con expresión pensativa.

Lentamente se apaga el reflector.

Escena 15

A Carlitos se le cae el bigote y Renata descubre que no es el psicólogo. Carlitos le confiesa a Renata que él no es psicólogo sino policía, y ella lo acepta

Se encienden las luces.

Mismo escenario que en la escena 12.

El relój marca las 4:50 PM hs.

Carlitos habla por teléfono, mientras fuma. Tiene la vestimenta de policía.

Carlitos.- Bueno, dale, te espero Rafa. Estoy en la oficina.

Suena la puerta.

Carlitos apaga el cigarrillo.

Carlitos.- Ahì te abro, compañero.

Renata.- Soy yo, Renata.

Carlitos se cambia la ropa de policía y la esconde rápidamente. Se pone el bigote, pero se le cae.

Carlitos abre la puerta.

Carlitos.- Renata. ¡Que sorpresa!. ¿No tenìas turno a las 6? Son las 3 recién.

Renata.- Pasa que necesitaba hablar con vos.

Renata se sienta, Carlitos cierra la puerta y se sienta.

Carlitos.- ¿Qué te tiene tan preocupada?

Renata se lo queda mirando.

Carlitos.- ¿Qué pasa? ¿Qué tengo?

Carlitos se toca la cara y nota que no tiene el bigote.

Renata.- Yo te conozco a vos… Pero no de acá…, de otro lado…

Carlitos se asusta y mueve la pierna rítmicamente.

Carlitos.- Te lo puedo explicar…

Renata.- Sos el policía que me tomó la declaración. Me mentiste todo este tiempo…

Renata se levanta de la silla y abre la puerta para irse.

Carlitos la cierra.

Carlitos.- Está bien. Tenés razón. No soy psicólogo, soy policía, pero lo hice por una buena causa. Te vi tan sola y triste, que quise ayudarte y mientras tanto me enamoré de vos…

Renata agarra el bigote del piso.

Renata.- ¿En serio?

Carlitos le sonríe como si fuera un niño travieso.

Renata suelta el picaporte de la puerta. Los dos se agarran de la mano y se abrazan.

Renata.- Eso si…

Carlitos.- ¿Qué?

Renata.- No vuelvas a usar bigote.

Se apagan las luces de golpe.

CONTINUARÁ

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