Trasnochado
Desvelo Esperando nada esta noche, escribo silencio sin pena, sin fortuna, sin nombre, sin porqué. Esperando como quien espera, en
Desvelo Esperando nada esta noche, escribo silencio sin pena, sin fortuna, sin nombre, sin porqué. Esperando como quien espera, en
una ausencia que apaga hasta el fuego más ardiente mis manos azules como la muerte como las sombras como la
Otra mañana que vuelvo a recurrir a ese desayuno diario, reiterado y monótono, y a su vez disfrutable en igual
Hace días que estás apareciendo con una violencia que me deja intranquila. Yo no te conozco y vos no me
Una vez la experiencia, cual viejo verde, me preguntó “¿Conoces el chiste del pintor?”, ante mi negación, el proclamó: “querrán
La inexperiencia viene acompañada por un deseo solemne de conocer, pero el precio a pagar por ese conocimiento es la
Lo natural que se vuelve desconocer lo bien conocido, soñando con obviar. Lo innatural que nos volvemos forzando justificaciones endebles