me encuentro atravesando incertidumbres

cercanías expuestas erosionadas

el corte fino sobre la piel

la sangre que emana de ninguna parte

hacia el lugar donde todo lo duele

el pasto seco entre nubes grises

la primavera que me mintieron

las mañanas son lluviosas

la herida nunca sana una aprende a no morir

en el intento

sin embargo muero cada noche

la cama fría me abraza

me acostumbré a dormir sin medias

se me hiela el pecho cuando me tocan

la soledad al final no parece tan mala

desarmo con cuidado

destejo los hilos que me atan

suelto y sostengo con la punta de mis dedos

de mí dedo

del único que tiene el cuero sin masticar

el aire no llega a mis pulmones

se atasca en la garganta

no hablo

no digo

tampoco callo

perdón

repito

perdón