Me siento horrible
Todo está mal dentro de mí
Me siento horrible
Suelto, en agonía
En silencio, sin sinfonías
Sufro en mi sillón cada día
Viéndome perecer
Y viéndome envejecer más todavía
En el tiempo impaciente
El cual ya no quiero ver.
Estoy acá, ayudame, necesito tus manos
No, no estoy bien, y sólo lo admito llorando
Busco algo a la lejanía
Para poder escapar de la penumbra oscura y maldita
La cual alumbra mi oscura y maldita realidad
Pero la vista hacia el horizonte me quita las agallas y me quedo de nuevo acostado en el sillón de casa.
Tantas estrellas, y no veo alguna mía
Tanto agobio, y no veo empatía