La noche de los lápices/

los perros ladran

los pasos se escuchan

la carbonilla se rompe sobre el papel

que poco a poco queda completo de ausencias

algunas ausencias pasan a ser desapariciones

yo no soy un pensador

los espectros viven sin importar el tiempo

aterran a los que

piensan demasiado en un futuro que no quieren que suceda.

*

_la vida de los poetas es dura_

dijo como burlándose de mi

abrió una bolsa con los dientes

igual que un perro

saco comida

sacudió los restos de plástico

y sobre un cartón

sobre el cual luego quizás dormiría

sirvió el festín

_hoy tuvimos suerte, poeta.

vamos a comer algo y luego me explicas la razón de esta existencia_

Deja un comentario

Tu dirección de correo electrónico no será publicada. Los campos obligatorios están marcados con *

Scroll al inicio