De tal palo tal astilla
—¿Por qué hay tantos relojes acá? —Porque es una relojería, hija. La conversación se volvía incómoda. Era la quinta vez
—¿Por qué hay tantos relojes acá? —Porque es una relojería, hija. La conversación se volvía incómoda. Era la quinta vez
Intento no querer a nadie, cosa normal en estos tiempos, me ubico justo en el medio de tus dos cuernos
Primer capítulo Acaban de meterme el termómetro por la oreja. Ya estoy acostumbrada, me quedo quieta. Es normal que sientas
La prevención ante todo —Mamá, ¿por qué te miras tanto? —Porque siempre hay que revisarse, mi amor. — ¿Y
—Mentalicen lo que desean, cierren los ojos, atrapen el tiempo. ¿Lo conocen?, ¿lo tienen? Ahora es el momento; colóquenlo con