Mamá me mentiste toda la vida. Dijiste que era preciosa e inteligente, que podría lograr cualquier cosa que me propusiera. Dijiste que estabas orgullosa de mi. Dijiste tanto, que naturalmente quedo grabado dentro mío. 

Mamá, el mundo no me ama. Vivo en las sombras, aterrada del sol. Cubriéndome de los rayos dorados, suplicando que nadie me descubra. Derritiéndome debajo de mi capa.

Mamá soy una pieza que no encaja. Tengo miedo mamá, terror de terminar sola y atrapada conmigo.

Estoy triste mamá. Tengo un vacío que no se llena. Es un hueco amargo e infinito, sin fondo. 

Estoy desesperada mamá, siento que hasta que finalmente pueda ser llenado, mi pena tampoco acabará. 

A veces mamá, confundo este vacío con hambre, con sueño, con furia. 

Puedo volver mamá? Quiero volver a ser la nena que seguía creyendo en tus mentiras, seguir soñando que los días son lindos porque son especialmente hechos para mi.