Nulo
palabras condensadas en este pecho pequeño huesudo cosas que podrían ser y no son, las piezas rotas que se apilan
Acariciar el teclado, esperando una respuesta. Esperando las palabras correctas para todo. Esperando que las expresiones idóneas nos atraviesen como
Por dentro, por fuera. Camina por mis espacios. Se los conoce de memoria. Lo dejo. Que me marque entera, lo
No podré librarme de ella de sus laberintos y dramaturgias me retuerce espiralada mintiéndome al oído, lamiéndome. . Estoy esclava
empieza un nuevo día y quiero que termine porque llega la noche y tengo que atarme el pecho para no
Dos poemas de Catulo sobre Lesbia y un gorrión. II. Passer, deliciae meae puellae, quicum ludere, quem in sinu tenere,