Hígado con cebolla
El hígado es una de las cosas más ricas y baratas que hay en una carnicería. Y pensar que no
No es casualidad que haya artículos y recetas de cocina en una página más o menos literaria. Desde hace cientos de años se ha elegido para hablar de estética, de manera privilegiada, la metáfora del gusto y sus connotaciones saborizadas. Tanto es así que (como suele suceder) olvidamos que es una metáfora. Las teorías en torno al gusto (sobre gustos hay mucho escrito) casi nunca se refieren a ese sentido que entra en juego cuando se come y se paladea algo, sino a la fruición artística que involucra a otros sentidos. Tampoco es casual que en literatura se hable de las posibilidades de la lengua y de los lenguajes, cosa que muy indirectamente se refiere a ese extraño músculo de la fonación (también importantísimo a la hora de clasificar sabores y deglutir) sino a la voz y al habla. De todas maneras, cualquier cosa que se diga o escriba en relación a la comida, sus placeres o displaceres, funciones, instrucciones y usos será mejor que “gastronomía”, que evoca la equívoca imagen de ese estómago sinuoso y amarillo de las láminas escolares. Mencionaré, a la pasada, otra cosa en común entre el arte (de la escritura) y la cocina: la alquimia. Trátase en los tres casos de combinar especias, friccionarlas, calentarlas y destilarlas observando ciertas tradiciones, considerar si el resultado es más o menos justo y aceptar el dorado fracaso.
El hígado es una de las cosas más ricas y baratas que hay en una carnicería. Y pensar que no
Casi todos los productos, si cocinás con con conciencia y te alcanza la plata, han de ser de buena calidad.
El zapallo es bastante americano de nacimiento y era, entre otras cosas, el postre de los indios de acá cerca.
Las aceitunas negras comunes compradas se curan en salmuera, no en sal. Además, les ponen algún acelerante en la curación,
Uno las escribe en servilletas, en boletas de compras, en un triangulito chiquito de papel arrancado al envoltorio de los
Con un zapallo calabaza de unos 700 gramos se obtienen para esta receta dos porciones muy generosas. Primero se cocina
Esta receta es mía y me gusta por su ductilidad, entre otras cosas. Todo esto se mete en un bowl
Advertencia: varios de los productos utilizados en esta receta son caros, y es posible que el amable lector no pueda