Durante mucho tiempo la pregunta fue por el ser de la literatura y después se pasó al para qué sirve la literatura. Más sensata que la anterior, esta pregunta dio lugar a muchísimas repuestas, casi infinitas según la posición adoptada. La literatura puede describir cómo echan humo las chimeneas de las fábricas o puede tomar la palabra para afirmar su propia imposibilidad de hablar.
El asunto es que, como designa un vacío, la literatura es siempre lo que pasó antes. Por eso se frustraron los intentos de fijar una definición. Cada vez que se dice “es esto”, la literatura ya está en otra parte.
Igual que en las Metamorfosis de Ovidio, cuando a Filomela le cortan la lengua y la encierran, pero igual se las arregla para contar su historia: la borda en una tela. Luego se convierte en ruiseñor, y quién sabe qué más ocurrió después.
Como en el mito, la literatura no tiene otra obligación que la de mutar. Dicho de otra manera, la literatura es siempre lo que está por venir.
Juan José Guerra
¡Hey! hoy tocó el infiernofeliz halloweenllorar no ya no es suficientehacen falta llamas Podés jugar con el filosobre la pielrecorrerla
No quiero que te pongas delante de mis muros, Quiero que aprietes conmigo la pared. Como ayer, Hay que aprender
Contar con uno mismo es el desafío de saberse solo en la construcción de su SER, es arremeter con fuerzas
vamos a quedar huérfanos mientras el mundo es otro pensaremos el amor la mesa la cocina mientras se huele el
El tiempo corre y corre,escapándose como arenaen nuestras manos.Pasan las horas,pasan los días,pasan los mesesY este sentimiento,tan bello como intenso,que
En B mayor, y todos los «No», lo más adultos posible. A una,que lleva nombre de estrellay el alias del
la vegetación come carne y estás llorando a carne tendida Una carne que no hace vida quiero caminar por el