Autor: Mora Bo Delmas

Sobre él, los relámpagos al acecho; bajo sus pies y manos, húmeda piedra que se precipitaba al arroyo inquieto. Su

El avión se alineó con la pista de aterrizaje y Avatar vio la ciudad, brillante al sol de la mañana

 La cabina del Toti se encontraba repleta con las seis personas que observaban la proyección del sonar. El ambiente del

Los cubos de hielo chocaron con ruido cuando Niko apoyó el vaso en la bandeja, señal que tomó para volver

Otro coche cruzaba como rayo la carretera, el quinto en los últimos diez minutos, contó el posadero sentado junto a

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—¡Nada responde!— gritó el comandante Liam Miller cuando lo envolvió la oscuridad. La luz de emergencia inundó la cápsula y

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